Vivir como opositor puede ser un reto difícil, ya que requiere dedicación, constancia y disciplina. El proceso de preparación puede llevar a muchos opositores a sentirse sobrepasados por el nivel de estrés y el uso intensivo del tiempo. Sin embargo, con las técnicas adecuadas para gestionar el estrés y manejar el tiempo, es posible hacer más efectivo este proceso sin sacrificar nuestro bienestar.
Para empezar la preparación, es fundamental entender que la presión en momentos de evaluaciones y exámenes requiere adaptarse. Muchas veces, se nos recomienda a los opositores no pasar por alto detalles para llegar rápidamente a una solución. Una buena planificación implica establecer objetivos claros, distribuir adecuadamente el tiempo disponible entre diferentes módulos (temas) y aplicar diversas estrategias de estudio para evitar la acumulación de tareas pendientes a última hora.
Concluyendo sobre la importancia crucial de priorizar y organizar adecuadamente los tiempos del estudio, evita sentirse ansioso o abrumado al entrar en un tema nuevo. La planificación diaria se lleva mejor en una hoja de trabajo donde debes anotar metas y actividades para cada día. Este sistema permite tener una visión clara de qué es lo que debe hacerse en cada momento, sin que nadie tengamos más tiempo a disposición. Debe recordarse que es crucial encontrar el equilibrio adecuado entre la dedicación al estudio y el descanso.
La salud física y mental también son fundamentales para manejar el estrés y aprovechar al máximo el tiempo. No podemos olvidar que, si bien el estudio merece toda nuestra dedicación y compromiso sin límites o reservas, es necesario establecer límites entre el mundo del conocimiento (mundo académico) y tu propio bienestar individual.
El estrés del estudio
El estrés no es únicamente un sentimiento de ansiedad que proviene de los exámenes, sino también un síntoma asociado a la frustración. La relación entre el desánimo ante una dificultad sin salida y el estrés es muy estrecha, como podemos ver en un entorno académico donde las personas más fuertes (en términos de conocimiento) pueden ser aquellas que, a pesar de sus limitaciones personales y del estudio general, no pierdan la motivación ni la voluntad para superarse cada día.
Muchas veces se nos dice que un opositor debe tener una actitud enérgica, optimista y perseverante para alcanzar los objetivos marcados. La buena organización, adaptada a las necesidades del opositor efectivo, ayuda a sentirnos más cómodos frente a aquellas situaciones en las que la situación (y el riesgo) es complicada. Por eso, si queremos evitar el estrés y poder aprovechar al máximo nuestra dedicación, debemos buscar soluciones creativas.
Algunos de usos alternativos para manejar esta problemática pueden ser, por ejemplo:
- La meditación diaria como técnica que nos permite sentirnos más relajados y prepararnos mejor para nuestras actividades.
- No es una recomendación de descanso excesivo, pero sí un buen equilibrio entre la dedicación y el período de ocio necesario.
Sin olvidar la importancia del apoyo social, tenemos a nuestro alrededor personas que, como nosotros mismos, pueden llegar a sufrir el estrés derivado de la oposición. Por eso conviene acudir a expertos para no estar solos en un mundo donde nadie tiene absolutamente derecho a fallar.
Gestión del tiempo

La capacidad para gestionar nuestro tiempo adecuadamente puede volverse el aspecto más débil del profesional dedicado al proceso de preparación para las oposiciones. Por ejemplo, muchas veces nos toca repasar una serie de temas previos antes de incorporar un nuevo módulo. Es en estos momentos de transición que resulta especialmente importante planificar.
No se puede pasar por alto la importancia del horario fijo que debemos establecer en nuestra vida diaria. Un esquema de rotación semanal, así como una hoja donde nos anotamos lo que debemos hacer cada día, pueden ayudarnos a planificar y dedicar el tiempo adecuadamente.
Así mismo, recordar que los días libres no son para relajarse sin ningún fin específico. Durante estos períodos de descanso podemos mejorar nuestras habilidades relacionadas con la disciplina y la organización.
Planificación efectiva

La planificación del estudio debe ser flexible y personalizada a las necesidades únicas de cada individuo (con independencia de que éstas sean superiores o inferiores en comparación con los demás opositores). Hay muchos factores asociados al proceso académico donde el estudiante opositor puede encontrar motivaciones diversas para enfrentar las dificultades que se nos vayan presentando.
No debemos confundir la dedicación a actividades diferentes como “otros intereses” y “oportunidades de aprendizaje”. Lo importante es asegurarse de no tener más objetivos adicionales, aunque importantes en principio. Esta precaución garantiza que siempre prioricemos el proceso del estudio entre muchos otros compromisos personales.
Por eso resulta conveniente hacer un seguimiento detallado y personalizado de nuestras actividades concretas para cada día, estableciendo prioridades claras que nos ayuden a avanzar hacia nuestros objetivos. Esto se puede confeccionar en forma impresa o utilizar la herramienta gratuita de gestión llamada Trello, por ejemplo para un mejor seguimiento.
Autoconfianza y motivación

Una situación complicada, sobre todo si no estamos cerca del objetivo final es lo atractivo que tiene su cumplimiento al fin. Así como el apoyo social ayuda de manera importante en esta ardua lucha, la autoconfianza puede tener un papel crucial para superar cualquier obstáculo y seguir adelante: sin ella, puede resultarnos muy dificil encontrar fuerzas.
Podemos tomar muchas estrategias para ayudarte en estos períodos. El hecho relevante es ver que hay una solución para cada reto. Además de la motivación previa (basada en la planificación), debes establecer pequeñas metas más claras y concretas dentro de ellas.
Es igualmente importante tener muy claro los objetivos generales para sentirnos realizados, al superar estos logros pequeños que van sumando fuerzas para ir más allá. Muchos aspirantes pueden estar de acuerdo en que el proceso de oposición tiene muchísimo y lo difícil no es tan sólo la competencia con otros aspirantes como la dificultad del propio conocimiento.
Apoyo social
Las redes sociales constituyen un aliado infalible en los momentos donde sentimos un gran vacío interior. En este sentido, podemos hacer contacto con muchas personas que a pesar de sentir el estrés por esta misma oposición pueden volverse fuente de motivación para ti gracias al intercambio con otras personas que están atravesando la misma situación.
No debemos olvidarnos que es posible no poder hablar adecuadamente solo en nuestro mundo virtual porque, algunas veces, este apoyo que estamos buscando (la aceptación o comprensión de otros personajes ajenos a nuestra comunidad) puede volverse inasequible para nosotros.
Una vez más el soporte social constituye el ingrediente esencial y más importante en nuestro día a día.