Superar oposiciones en la Comunidad Valenciana requiere, además de conocimientos específicos y habilidades prácticas, dominio del valenciano como lengua oficial.
Es importante destacar que el gobierno autonómico valenciano valoriza profundamente su idioma propio, por lo que las oposiciones a puestos en administraciones locales o centrales incluyen pruebas de valencia.
Por otro lado, los requisitos lingüísticos van desde el nivel B1 hasta el C2 según la legislación local.
Sin embargo, cada comunidad autónoma tiene sus propias exigencias sobre el dominio del valenciano.
Para optar a oposiciones en la Comunidad Valenciana es necesario poseer un cierto nivel de dominio del valenciano que se acredita mediante un certificado.
El gobierno central y los gobiernos autonómicos son los encargados de establecer estos estandares lingüísticos para las oposiciones en cada una de sus administraciones públicas.
El gobierno valenciano ha establecido que los candidatos deberán aprobar, al menos, un nivel B1 (A1, A2, B1, B2, C1 y C2) del Marco Común Europeo para las lenguas (MCE) en el caso de postulaciones a puestos oficiales que no precisen necesariamente tener dominio del valenciano para desempeñarlas.
También están los gobiernos que exigen un nivel B1 o incluso C2 si es necesario.
El gobierno autonómico considera fundamental la igualdad de acceso a las ofertas públicas de empleo independientemente de su procedencia y el desconocimiento u no utilización del valenciano en estas administraciones.
Así, se pueden solicitar documentos que denoten el dominio lingüístico para asegurarlo al realizar las pruebas y seleccionar a los candidatos. Se puede elegir también utilizar un certificado específico emitido por la RAE.
Pese a ello, muchos aspirantes prefieren consultar a centros de idiomas especializados o instituciones oficiales que les ayuden en el logro del nivel básico requerido para las pruebas.
De igual forma se solicita un planificación previa donde los postulantes establezcan sus objetivos. Por lo tanto, es importante hacer una evaluación personalizada de sus habilidades y conocimientos en la lengua valenciana antes de iniciar cualquier acción o estudio específico para abordar un nivel cualquiera.
Los cursos de lengua que se dirigen a alcanzar el nivel de B1 en valencia tienen sus beneficios propios, como son las pruebas de nivel y seguimiento por parte del equipo docente y también es uno de los requisitos más exigentes por parte del gobierno autonómico para tener acceso a puestos oficiales.
Dentro de las actividades o planes educativos que se llevan a cabo en el gobierno valenciano hay una especial atención puesto en la educación en lengua valenciana donde, junto al resto de cursos impartidos en instituciones públicas y privadas, existen otras más especializadas orientados a los empleados públicos.
Exigencias actuales

El 16 de octubre de 2020 el conseller President, Carlos Álvarez Marañón, anunció públicamente su decisión de hacer uso del valenciano en las pruebas selectivas oficiales.
Entre las nuevas estrategias se encontraba mejorar la presencia, oferta general y calidad curricular ofreciendo cursos de valencia como herramientas instrumentales para quienes pretendan presentarse a oposiciones.
Con motivo de su publicación el 12 de noviembre del año siguiente por primera vez se informaron de que se habían incluido nuevos ejercicios dirigidos principalmente a quienes estaban solicitando ser admitidos a las pruebas selectivas en la administración pública.
Esto fue así cuando el primer equipo lo decidió, por lo cual todas los puestos que ofrecí la comunidad autónoma ya contaron con requisitos lingüísticos.
Prueba de valencia

Se pueden llevar a cabo este tipo de pruebas con distintos objetivos como:
La inclusión gradual del ciudadano en las instituciones educativas para promover el aprendizaje del valenciano: un curso, al menos, tiene que incluir una clase donde los temas vayan sobre gramática y lengua.
Esto se ve reflejado tanto a lo general como lo particular. Es decir por un lado la normativa establece la adopción de acciones o planificadas orientadas para asegurar el uso correcto del valenciano en las funciones administrativas y servicios oficiales.
Por otro lado son los propios candidatos quienes pueden aprovechar esta oportunidad específica a su favor. Y, sin duda, una prueba puede ser un ejercicio más atractivo con este tipo de prácticas dirigidas al dominio del valenciano.
La eliminación gradual y controlada de las formas arcaicas del idioma valenciano en el lenguaje cotidiano y documental: también se apuntará de forma clara que es un requisito fundamental.
El Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas por niveles

En 2001 la convención sobre la protección y promoción de las lenguas de Europadentificó seis niveles de competencia lingüística. Estos son los siguientes:
A1. Un nivel inicial donde se da inicio al conocimiento de una lengua, el cual no implica todavía ni una comprensión básica del mensaje externo.
A2: En esta primera fase con respecto a las otras, se amplían aún más y se consigue entender con facilidad conversaciones coloquiales en la medida en que uno esté interesado y los temas habituales sean tratados a lo largo de una visita.
B1. Es el único nivel básico reconocido por distintos organismos gubernamentales locales donde la persona puede desempeñar su trabajo normalmente, realizar acciones diversas al trabajar o mantener conversaciones con personas más directas que no se centran únicamente sobre temas universitarios.
B2: Aunque todavía no se trata de lenguaje escrito ni de una lengua profunda, logra ser un lenguaje comprensible por los propios usuarios del mismo y es cuando su uso habitual en la conversación llega a ser común incluso entre desconocidos.
Requisitos en comunidades donde el valenciano no se ha utilizado nunca
Dentro del gobierno de España las comunas que establecieron el dominio obligatorio del valenciano como única lengua oficial y obligatoria en su administración públicas, son Castellón, València. Además, existen otras donde puede ser una de ellas o utilizarse pero es no necesario utilizarla para realizar cualquier puesto público.
Y cuando se trata de optar a puestos administrativos locales donde tampoco era requisito la adopción de este idioma como herramientas para acceder a los empleos en general y las administraciones públicas, su aplicación ya está establecida y vigente.
Conclusión

El gobierno valenciano se encuentra actualmente trabajando en establecer un plan concreto e integral que permita el conocimiento de la lengua entre todos.
